Preguntas Frecuentes

¿Cuáles son los principales TCA?

La anorexia, bulimia y trastorno por atracón son trastornos mentales que conllevan alteraciones en la forma de pensar, sentir y comportarse en relación a la alimentación, el peso o la figura.

 

¿Alguno es más grave que otro?

Cada uno de ellos puede tener diferentes criterios de mayor o menor gravedad, según sus repercusiones médico, nutricionales, psicológicas y sociales.

 

¿Las personas con TCA pueden pasar de un trastorno a otro?

Sí, es bastante frecuente que cambien de un diagnóstico a otro. El más frecuente es la transición de la anorexia a la bulimia y/o viceversa. Es frecuente que las personas con TCA tengan épocas en las que la restricción alimentaria esté más presente y otras en las que predominen los atracones y purgas. Las causas principalmente se deben a factores emocionales.

 

¿Cuál es la causa de los trastornos de conducta alimentaria?

No se debe a una causa única, son multicausales. Esto significa que distintos factores de riesgo conocidos aparecen en mayor o en menor medida y predisponen a determinadas personas a desarrollar un TCA. Existen factores individuales (psicológicos, psiquiátricos), familiares y sociales.

 

¿Los TCA son crónicos?

La recuperación total es posible y de hecho un 70% de los afectados por TCA se recuperan siguiendo un tratamiento correcto. Lo que debemos tener en cuenta es que, como en el caso de otros trastornos mentales que se inician en una fase temprana, la duración de los TCA es larga y, a veces, fluctuante y cambiante en función a diferentes factores ambientales y/o situaciones estresantes.

 

¿Por qué se dan recaídas después de un periodo de estabilidad?

La recuperación completa llega después de un proceso muy largo. Habitualmente, las recaídas se pueden dar en el proceso de recuperación y es importante que no conduzcan al desánimo o la desesperanza.

 

¿Los TCA tienen solución a través de un tratamiento adecuado?

Es frecuente que las personas con TCA no tengan conciencia de enfermedad. Ello quiere decir que normalizan muchas conductas, y en consecuencia, rechazan el tratamiento. Por ello, es importante entender que la primera fase del tratamiento es trabajar esta conciencia del trastorno y la motivación para querer salir de él, porque la colaboración y actitud de la persona en el tratamiento es clave.

Si se estabiliza el peso, ¿la persona ya está curada?

No. La normalización del peso a través de hábitos alimentarios saludables es igualmente imprescindible, pero no suficiente. Debe acompañarse de la mejora psicológica y social de la persona.

 

¿Cuánto dura y cómo es la recuperación?

No menos de un año para empezar a ver los resultados y la recuperación no suele ser lineal. Pueden haber altibajos hasta recibir el alta definitiva. Es importante tener en cuenta que al inicio puede que se produzca un empeoramiento de los síntomas debido a que empieza a afrontar sus problemas. La duración de los TCA es larga y, a veces, fluctuante y cambiante en función a diferentes factores ambientales y/o situaciones estresantes. Es un tratamiento que requiere de tiempo y paciencia.

 

¿Cuáles son las enfermedades psiquiátricas que se asocian más frecuentemente con los trastornos de la conducta alimentaria?

Las más habituales son los trastornos del estado de ánimo (40-80 %), (40%), los trastornos de ansiedad (10-40 %) y el trastorno obsesivo-compulsivo (40 %). La desnutrición puede, al mismo tiempo, incrementar estos síntomas. En jóvenes adultos encontramos, además, una frecuencia superior en el abuso y la dependencia de sustancias, trastornos de la personalidad y trastornos relacionados con el control de impulsos. Estos trastornos añadidos se deberán tener en cuenta al establecer un tratamiento, tanto psicoterapéutico como farmacológico.

 

¿Es necesaria la medicación para tratar un TCA?

Los fármacos no curan estos problemas, pero pueden mejorar determinados síntomas, como la ansiedad, los pensamientos obsesivos, la impulsividad, la depresión, etc.

 

¿Un TCA puede llevar al suicidio?

Las conductas autolesivas, los intentos de suicidio y la muerte, constituyen las consecuencias más graves de los TCA. Las personas con trastornos alimentarios tienen más conductas autolesivas, ideas suicidas, intentos de suicidio y suicidio que la población general. El trastorno depresivo mayor y el abuso de sustancias asociado al TCA son factores de riesgo para la conducta del suicidio.